La selección de nuestras semillas se hace minuciosamente con unos dientes gordos y sanos ese es el primer escalón para que la cadena de calidad sea consistente.
Se pasa con el tractor abriendo surco, y después las maquinas sembradoras hacen el trabajo, para dejar paso a los agricultores supervisados por Ingeniero Agrónomo que en todo momento supervisa la manipulación de la siembra y así ver las necesidades que tiene, para poder utilizar cualquier producto homologado y constatado en el libre de campo.